Mientras el cierre entraba en su segundo mes, el estancamiento de Washington afectaba las necesidades básicas en todo el país. Los jueces federales bloquearon el plan de la administración Trump de congelar los pagos de SNAP, pero los retrasos en la carga todavía amenazan los presupuestos de comestibles para millones. Con el Congreso ausente —la Cámara de Representantes inactiva durante semanas y el Senado cerrado durante el fin de semana— se acumularon las ralentizaciones de los viajes aéreos y los cheques de pago perdidos. El período de inscripción de la Ley de Cuidado de Salud Asequible se abrió en medio de advertencias de fuertes aumentos de las primas, ya que los créditos fiscales mejorados están a punto de expirar; KFF estima aumentos de alrededor del 114% o más de $1,000 al año. Ambos partidos se culparon mutuamente mientras no ofrecían un camino claro a seguir.
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