El partido liberal-progresista D66 de Rob Jetten repunta en las elecciones holandesas, allanando el camino para el primer ministro abiertamente gay

El liberal-progresista D66 de Rob Jetten se disparó en las elecciones holandesas, dejándolo casi seguro de convertirse en primer ministro, aunque la confirmación formal podría llevar semanas. Con los escaños del partido de extrema derecha PVV aparentemente cayendo de 37 a 26, a la par con D66, y otros partidos importantes negándose a trabajar con Geert Wilders, Jetten dijo a sus partidarios eufóricos que el centro puede resistir y 'hemos pasado página con Wilders'. El político de 38 años, proeuropeo y pro-clima, prometió unir un país dividido después de que el efímero gobierno que incluía a Wilders colapsara debido a sus planes antiinmigración. Sería el primer primer ministro abiertamente gay de los Países Bajos.

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