Gran Bretaña está intensificando los esfuerzos para evacuar a sus nacionales de Jamaica, azotada por el huracán, fletando vuelos para británicos y familiares directos con documentos válidos, al tiempo que prioriza a los niños y a las personas con necesidades médicas. Se cree que hasta 8.000 ciudadanos británicos se encuentran en la isla, donde al menos cinco personas han muerto, las casas están destrozadas y las inundaciones son generalizadas. Jamaica sigue en gran parte sin electricidad, aunque el aeropuerto de Kingston ha reabierto y los vuelos de ayuda y comerciales se están reanudando. Funcionarios locales dicen que los refugios que albergan a unas 13.000 personas permanecerán abiertos y advierten que el número de muertos podría aumentar.
Comments