Un recluso de Illinois, Dwayne “DJ” Tottleben, de 33 años, murió tiroteado el 10 de octubre en la Penitenciaría de EE. UU. Coleman I en Florida, un suceso poco común donde el personal normalmente no porta armas de fuego. Su familia dice que la Oficina de Prisiones no ha dado ninguna explicación; el médico forense local confirmó el tiroteo. Sus seres queridos hablaron con él esa mañana y dicen que nada parecía ir mal. La prisión suspendió las visitas y puso la instalación en operaciones modificadas mejoradas. La familia de Tottleben ha lanzado un GoFundMe, y su abogado planea un examen independiente mientras presiona por la divulgación completa.
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